La mayoría de las personas llegan a conocer bien a su jefe durante la relación laboral. Los jefes inspiran y motivan a sus empleados ayudándoles a alcanzar sus objetivos y a determinar sus próximos pasos profesionales. Cuando tu jefe ya no está en la empresa, es posible que tengas que procesar la información y seguir adelante.
En este artículo, compartimos las cosas que puede hacer después de enterarse de que su jefe ha sido despedido.
Relacionado: ¿Cuál es la diferencia entre el despido y el cese?
6 cosas que hay que hacer después de que despidan a tu jefe
Aquí tienes algunas indicaciones sobre lo que debes hacer después de descubrir que tu jefe ha sido despedido:
1. Seguir trabajando
Una de las mejores cosas que puedes hacer después de enterarte de que tu jefe ya no trabaja en la organización es seguir haciendo tu trabajo como siempre lo has hecho. Aunque un jefe es alguien que supervisa tu trabajo, quedarse sin él no significa que sea apropiado llegar tarde, descuidar proyectos o tomarse más tiempo del necesario para charlar con un compañero. La alta dirección y otras personas con las que trabajas podrían considerar estas acciones como si te aprovecharas de una situación precaria.
En su lugar, querrá encontrar formas de destacar ante el equipo directivo existente haciendo cosas como:
- Tomar la iniciativa en proyectos o tareas pendientes.
- Programar una reunión con la dirección para ver si hay algo que pueda hacer para ayudar en la transición.
- Mantenerse comprometido con su mismo nivel de productividad.
- Llegar al trabajo a tiempo y hacer los descansos previstos.
Es importante que la marcha de tu jefe no afecte gravemente a tu compromiso con el puesto. Existe la posibilidad de que más personas dentro de su organización presten más atención a lo que usted y sus compañeros de trabajo están haciendo después de la noticia, así que demuéstreles que se toma su trabajo en serio y que quiere hacer todo lo posible para garantizar que las interrupciones sean limitadas.
Relacionado: Formas de hacerse imprescindible en el trabajo
2. Manténgase profesional
Especialmente si realmente disfrutabas trabajando para tu jefe, puedes sentirte desairado por su despido. Sin embargo, mantén la profesionalidad independientemente de tus pensamientos y sentimientos personales sobre la noticia. Absténgase de hablar negativamente de la empresa o de los miembros de la alta dirección que puedan haber participado en la decisión de despedir a su jefe. No sólo es inapropiado hablar negativamente o echar la culpa en esta situación, sino que alguien con quien charles sobre el tema podría hacer saber a los ejecutivos lo que estás diciendo, lo que puede meterte en problemas.
También querrá evitar hablar negativamente de su jefe saliente, independientemente de cómo se sintiera trabajando con él o de lo seguro que se sienta al compartir sus opiniones. Es posible que nunca sepas la razón por la que te han despedido, por lo que lo mejor es que seas profesional cuando hables de él. Si un compañero de trabajo u otro directivo quiere hablar de la situación, no pasa nada por excusarse de la conversación o hacerles saber que no quieres entablar una conversación sobre el tema.
3. Pensar en su futuro
Es probable que en las reuniones y revisiones anuales con tu jefe despedido hayáis hablado de tus planes profesionales, de lo que podían hacer para ayudarte, de dónde te veías dentro de cinco años y de las oportunidades que querías explorar. Probablemente conocían mejor lo que querías de la empresa y lo que te motivaba en el trabajo que la mayoría de las personas de la oficina. Perder a tu jefe, que puede haber sido un gran aliado para ti, puede ser una situación difícil.
Para prepararte para lo que te espera, vuelve a pensar en tus objetivos profesionales. Considere la posibilidad de escribirlos en un papel para poder repasarlos uno a uno y determinar el mejor curso de acción. También puedes averiguar quién puede ayudarte en el ínterin o decidir que lo mejor es esperar hasta que alguien nuevo asuma el cargo o que otro directivo te hable de tu puesto actual. Evalúe su situación particular antes de tomar una decisión.
Cuando pienses en tu futuro, piensa en él más allá de tu carrera en tu empresa actual. Puede que sientas que tu jefe es la única persona que te mantiene en tu actual lugar de trabajo, en cuyo caso puede que quieras explorar oportunidades externas. Tómate este tiempo para decidir si quieres seguir en tu puesto, intentar conseguir un ascenso en la misma empresa o probar algo totalmente nuevo. Esta puede ser la oportunidad perfecta para adentrarse en el mundo del emprendimiento y el autoempleo, o para emprender proyectos como freelance para adquirir más experiencia en una determinada habilidad.
Si piensa quedarse en su empresa actual y quiere intentar un ascenso, empiece a pensar y actuar como un líder. Encárgate de los proyectos de grupo, piensa en lo que el equipo necesita hacer y que quizá tu jefe haya manejado antes y reúnete con los miembros de la dirección para compartir tus conocimientos sobre el departamento y cómo puedes ayudar a avanzar.
Relacionado: Cómo pedir un ascenso (y cómo hacerlo eficazmente)
4. Evite preocuparse
Puede ser preocupante que despidan a tu jefe, sobre todo si es alguien a quien admirabas y con quien te gustaba trabajar. Sin embargo, intenta no preocuparte por tu propia posición en la empresa. Aunque el despido de tu jefe puede ser una señal de otros cambios que se avecinan, eso no está garantizado. Si asumes que eres el siguiente o que tu trabajo y el de tus compañeros está en peligro, podrías perder tu productividad, luchar contra la motivación y desvincularte del puesto y de tus compañeros.
Lo mejor que puede hacer en esta situación es mantenerse positivo, seguir haciendo su trabajo como si su jefe siguiera empleado y demostrar a los demás por qué es usted un activo valioso para la organización. Si la alta dirección está decidiendo los próximos pasos, es más probable que quiera retener a alguien que toma la iniciativa, se mantiene neutral ante una situación delicada y sigue haciendo su trabajo como se espera.
5. Permanecer conectado
Hay algunas situaciones en las que no es apropiado ponerse en contacto con tu antiguo jefe, como si tu empresa te dice expresamente que no lo hagas o si sabes que la empresa dejó libre a tu jefe por actividades delictivas. Sin embargo, si es apropiado, acércate a tu ex jefe una o dos semanas después de que haya dejado la organización. Esto le dará el espacio necesario para calmarse y trabajar con sus emociones, de modo que ambos puedan tener una conversación productiva.
Es posible que quiera ponerse en contacto con su jefe para expresarle lo mucho que ha disfrutado trabajando para él y cómo le echará de menos en el trabajo, pero evite entablar cualquier conversación que sea negativa hacia la empresa o los que siguen empleados. Es mejor no aumentar los malos sentimientos que su jefe pueda estar experimentando, y definitivamente no querrá que otros en la oficina escuchen lo que usted ha dicho.
También puedes ofrecerte a escribir una carta de recomendación para tu antiguo jefe si está solicitando un puesto y le vendría bien que un antiguo empleado hablara de sus habilidades de liderazgo. En la carta, asegúrate de abordar cuál era tu papel, cómo te ayudó tu jefe a apoyarte en tu puesto, las habilidades que te enseñaron y las oportunidades en las que trabajaron contigo.
Otra de las ventajas de seguir en contacto con tu antiguo jefe es que puede ayudarte a conseguir un puesto más adelante. Si van a crear su propia empresa o pasan a trabajar para una organización que a usted le interese, es posible que quiera que le tengan en cuenta para un puesto.
Relacionado: Ejemplo de carta de referencia de carácter y consejos
6. Actualice su currículum
Otro paso que debe dar cuando su jefe es despedido es actualizar su currículum. Si cree que la empresa está pasando por una gran transición o que tendrá que tomar más decisiones laborales más adelante, es una buena idea tener listo un currículum actualizado para poder optar a otras oportunidades. Antes de que pase mucho tiempo, piense en todos los proyectos en los que ha participado y en las habilidades que ha aprendido durante su empleo, e inclúyalos en su currículum. Consigue una copia de la descripción de tu trabajo para asegurarte de que puedes incluir todos los detalles relevantes sobre tu función y tus responsabilidades.
Dependiendo de su nivel de comodidad y de su nivel de deseo de permanecer en su actual lugar de trabajo, puede empezar a solicitar puestos de trabajo o compartir su currículum con contactos que puedan tenerle en cuenta para puestos que vean.