Cómo gestionar un largo viaje al trabajo

Algunos profesionales se desplazan diariamente al trabajo, y para algunos, el trayecto entre el hogar y el trabajo es largo, difícil y costoso. Si tienes que hacer un largo viaje al trabajo, puede que necesites ayuda para reducir el estrés de los desplazamientos. Si vas a solicitar un puesto de trabajo con un desplazamiento largo, debes considerar formas de afrontar las largas distancias.

En este artículo, hablamos de lo que suponen los desplazamientos al trabajo y te damos consejos para sobrevivir a ellos.

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¿Qué es el desplazamiento al trabajo?

Viajar regularmente una determinada distancia desde la residencia hasta el trabajo, ya sea en coche o en transporte público, se denomina desplazamiento. Una persona que viaja al trabajo es alguien que recorre esta distancia. La duración de los desplazamientos al trabajo viene determinada por varios factores, como la distancia entre el domicilio y el trabajo, el medio de transporte y el tráfico, que puede hacer que el viaje sea más largo de lo habitual.

Un desplazamiento razonable depende de la persona que se desplaza al trabajo y de cuánto cree que vale recorrer una determinada distancia por su empleo y su salario. Si el viaje al trabajo se hace demasiado largo, puede considerar la posibilidad de encontrar un trabajo más cercano a su residencia o que le permita trabajar a distancia, o gestionar mejor su tiempo para encajar el viaje en su horario.

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Cómo manejar un viaje largo

Viajar un largo día al trabajo puede ser agotador para mucha gente. Cuanto más a menudo lo hagas, más estresante puede resultar. A pesar de ello, hay varias formas de sobrellevar un viaje largo al trabajo. Aquí tienes algunos consejos sobre cómo afrontarlo:

  1. Vete al trabajo antes de tiempo.
  2. Cree un entorno relajante.
  3. Sé estratégico.
  4. Prueba a utilizar el transporte público o a compartir el coche.
  5. Lleva comida y bebida.
  6. Tecnología de límites.
  7. Determina tu satisfacción en el trabajo.

1. Salir del trabajo antes de tiempo

Salir de casa y ponerse en camino antes de lo habitual puede ayudar a aliviar una gran cantidad de estrés. Si sale con tiempo de sobra, evitará cualquier preocupación por llegar tarde al trabajo. Además, salir temprano puede hacer que llegue al trabajo antes de lo esperado y probablemente impresionará a sus empleadores. Considere la posibilidad de salir al menos 15 minutos antes de lo habitual para facilitar el desplazamiento al trabajo. Asegúrate también de dejar tiempo extra para llenar el depósito de gasolina, y planifica con antelación los días en los que necesitarás hacerlo.

2. Crear un entorno reconfortante

Durante un largo viaje al trabajo, puede ser útil hacer que el viaje en coche sea más agradable. Piense en qué tipo de entretenimiento puede utilizar durante un largo viaje al trabajo y cuál será el más beneficioso para ayudarle a distraer su mente del largo viaje y del intenso tráfico. Escuche su música favorita para adaptarse a su estado de ánimo, desde canciones alegres hasta melodías acústicas. Escuche un podcast o audiolibro atractivo que le enseñe algo, lo que podría ahorrarle más tiempo personal al aprender mientras conduce.

También puede pasar su viaje al trabajo llamando a sus amigos o familiares con el manos libres a través de los altavoces de su coche.

Otra opción para hacer más llevadero el viaje al trabajo es llevar un difusor portátil de aceites esenciales para respirar aceites calmantes como el de lavanda o el de cedro mientras se conduce hacia el trabajo. Esto le ayudará a relajarse y a despejar la cabeza antes de entrar en el lugar de trabajo.

3. Sé estratégico

Ser estratégico también puede ser beneficioso. Hay varias formas de ser estratégico en función de los desplazamientos y la ubicación. Por ejemplo, tenga en cuenta los días de mayor tráfico y prepárese para salir del trabajo antes de lo habitual en los días en los que prevea más tráfico. También es importante tener en cuenta las carreteras de peaje y cómo afectan a su ruta. En algunos casos, pueden encarecer el viaje, pero le permitirán llegar antes al trabajo o a casa.

Si se encuentra en un nuevo trabajo con un desplazamiento largo, también puede ser útil buscar las rutas más rápidas antes del primer día y guardarlas en una aplicación GPS del teléfono o en el sistema del vehículo. También deberías considerar qué opciones de transporte público tienes a tu disposición. En definitiva, planificar tu viaje al trabajo de forma estratégica puede suponer una gran diferencia.

4. Intentar el transporte público o compartir el coche

Si conducir largas distancias le resulta demasiado estresante, considere las opciones de transporte público. Aunque puede que te lleve más tiempo y te cueste más llegar a tu destino, puede que te dé más tiempo para ti mismo para despejarte y aliviar tus preocupaciones por el tráfico. Muchas empresas ofrecen también transporte público gratuito.

También puede conducir usted mismo unos días a la semana y utilizar el transporte público para el resto. Aprovecha el tiempo que habrías pasado conduciendo para leer un libro, escuchar una lista de reproducción o preparar tu jornada de trabajo, las próximas reuniones o presentaciones. También puedes echar una pequeña siesta mientras viajas en transporte público.

También puede considerar la posibilidad de compartir el coche con compañeros de trabajo que vivan en su zona para aliviar la carga de conducir usted mismo.

5. Envasar alimentos y bebidas

Si no ha tenido tiempo de desayunar o simplemente tiene hambre durante el trayecto, llevar un tentempié puede proporcionarle un estímulo rápido. Considera la posibilidad de llevar tentempiés energéticos, llenos de proteínas y saludables, en lugar de alimentos con almidón o grasa. También es útil llevar agua. Si llevas un tentempié, tendrás una actitud más positiva. Llevar tu propio café o comida también puede ahorrarte el tiempo extra de parar en un autoservicio.

6. Tecnología de límites

Antes de salir a la calle, considere la posibilidad de limitar o eliminar por completo su tiempo de uso de la tecnología. Esto incluye no consultar el correo electrónico, las cuentas de las redes sociales ni responder a las llamadas entrantes. Tómate un tiempo de tranquilidad para ti mismo antes y durante el trayecto para que tu mente descanse y se recargue antes de entrar en una larga jornada de trabajo.

7. Determine su satisfacción laboral

Por último, si el viaje al trabajo se te hace demasiado largo por mucho que intentes poner en práctica mecanismos de superación, plantéate si merece la pena. Si quieres progresar en la empresa en la que trabajas, un viaje largo al trabajo puede merecer la pena. Sin embargo, si no estás contento con tu puesto y no crees que te paguen lo suficiente como para compensar el coste emocional y económico de los desplazamientos, considera la posibilidad de encontrar un nuevo trabajo con un trayecto más corto o que te permita trabajar a distancia, una opción cada vez más popular. Si quieres seguir en tu empresa, considera la posibilidad de preguntar a tu supervisor si es posible trabajar a distancia, aunque sólo sea unos días a la semana, para aliviar la carga de los desplazamientos.