Guía completa de la metodología de cascada

El modelo de cascada es una de las metodologías de gestión de proyectos más conocidas. Es popular por su planificación meticulosa, su atención meticulosa a los detalles y su estricta aplicación secuencial.

En este artículo, explicamos qué es la metodología en cascada, enumeramos las etapas empleadas en este método en cascada, lo comparamos con el enfoque ágil de la gestión de proyectos y el desarrollo de software, y detallamos algunas de las ventajas y limitaciones del método en cascada.

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¿Qué es el método de cascada?

Un equipo de desarrollo de proyectos que utiliza el enfoque de cascada sigue una secuencia lógica de pasos a través del ciclo de vida de desarrollo de software, que a menudo se denomina SDLC. El desarrollo con este método se produce en un orden lineal y secuencial. La siguiente fase del proyecto no avanza hasta que la fase anterior está terminada.

Aunque su popularidad ha disminuido a lo largo de los años en favor de metodologías cada vez más ágiles, la naturaleza lógica del modelo en cascada y su sencilla implementación mantienen su prevalencia en la industria. Cuando se utiliza este método, los requisitos del cliente y de las partes interesadas se recopilan al principio del proyecto y luego se utilizan para desarrollar un plan secuencial que se adapte a ellos. Aunque es el más utilizado en el desarrollo de software, el método de cascada también puede emplearse en otros proyectos de TI, así como en la construcción.

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Etapas del método de la cascada

El método en cascada tiene una naturaleza intrínsecamente metódica que conduce un proyecto a través de pasos directos. Este método suele tener entre cinco y siete fases. Aunque los nombres específicos y el número de pasos pueden variar según el desarrollador o el proyecto, los conceptos suelen ser los mismos. Estas son las fases básicas del modelo de cascada:

1. Requisitos

Los requisitos del cliente para el producto final se recogen al principio del proyecto y se compilan en un documento de requisitos que se utilizará para guiar el proceso. Por lo general, estos requisitos enumeran lo que debe hacer la aplicación sin tener en cuenta cómo se llevará a cabo. La recopilación de los requisitos al principio del proyecto elimina la necesidad de una mayor participación del cliente y permite al equipo planificar todas las demás fases.

2. Análisis

Una vez reunidos los requisitos, se evalúa el sistema para calibrar las herramientas necesarias y crear los modelos que se utilizarán en la aplicación terminada.

3. Diseñe

La fase de diseño puede dividirse en dos subfases: diseño lógico y diseño físico. Durante la subfase de diseño lógico, se realiza una lluvia de ideas de soluciones para satisfacer los requisitos deseados. Es durante la subfase de diseño físico cuando las ideas teóricas se transforman en planes concretos y especificaciones de diseño, como servicios, capas de datos y lenguajes de programación.

4. Implementación

Es durante esta fase cuando se escribe el código real para cumplir las especificaciones, los modelos y los requisitos que se esbozaron en las fases anteriores.

5. Prueba

Una vez que se ha escrito el código, los probadores beta, el departamento de control de calidad y cualquier otro probador pertinente exploran la aplicación sistemáticamente para descubrir cualquier problema o defecto en el software. Esta fase suele requerir una repetición de la fase de codificación para solucionar los errores encontrados. En ocasiones, esta fase también implica al cliente, permitiéndole probar el producto para asegurarse de que todos los requisitos se han cumplido adecuadamente.

6. Mantenimiento

Una vez finalizadas las pruebas, la aplicación está lista para ser liberada. Esta fase final suele consistir en el apoyo continuo, manteniendo la aplicación actualizada y funcional, así como abordando cualquier fallo o error cuando se encuentre.

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Cascada vs. Agilidad

Las dos principales distinciones entre las metodologías son la participación del cliente y la acción lineal. Cuando se utiliza el método de la cascada, cada fase tiene que completarse antes de poder empezar la siguiente. A diferencia del método en cascada, el modelo ágil realiza las funciones de prueba y desarrollo simultáneamente. Además, la metodología ágil fomenta la comunicación entre probadores, gestores, desarrolladores y clientes a lo largo de todo el proceso de desarrollo, mientras que el método en cascada recoge los requisitos del cliente al principio del proyecto y limita su participación a partir de ahí.

Cuando se utiliza una metodología ágil, el proyecto se planifica en «sprints» en lugar de en hitos. En otras palabras, las tareas se priorizan y se completan en cortos periodos de tiempo, a menudo en intervalos de dos semanas. En lugar de definir las fases durante la etapa de requisitos, todas las tareas son flexibles dentro de este modelo y se completan en función de diferentes variables, como la retroalimentación del cliente y el éxito de los sprints anteriores. Esto permite que los comentarios guíen el proceso y cambien los requisitos a lo largo del desarrollo.

Ventajas del modelo en cascada

Aunque su prevalencia ha disminuido a lo largo de los años, los métodos en cascada pueden seguir aportando muchas ventajas al proceso de desarrollo de un proyecto. Esto es especialmente cierto en el caso de las organizaciones más grandes o de los proyectos que necesitan plazos estrictos y etapas que los guíen. He aquí algunas de las otras ventajas de utilizar el modelo en cascada:

  • Es fácil de poner en práctica y de gestionar porque establece unas expectativas y unos resultados claros para cada fase.
  • Debido a la falta de participación del cliente y a la incorporación de nuevos requisitos, los métodos en cascada pueden ser más eficientes, agilizando el proceso y garantizando una finalización más rápida del proyecto.
  • El alcance y los requisitos detallados que proporciona la cascada permiten una adaptación perfecta incluso cuando los equipos y las responsabilidades cambian.
  • La disciplina y la organización se imponen tanto al proyecto como al equipo que lo desarrolla.
  • Es ideal para organizaciones y equipos que necesitan una estructura centrada en datos e hitos.
  • Como el calendario del proyecto se detalla al inicio del mismo, permite una estimación más precisa de los plazos, los recursos necesarios y el presupuesto del proyecto.
  • El progreso es fácil de medir.

Limitaciones del modelo de cascada

Aunque el método en cascada tiene muchas ventajas, los cambios en el desarrollo y la tecnología han demostrado que el método ágil es más ventajoso en la mayoría de las situaciones. He aquí algunos de los retos a los que puede enfrentarse al utilizar el modelo en cascada:

  • Como las pruebas se realizan al final del proyecto, aumenta la probabilidad de que se encuentren defectos y de que sean considerablemente más caros de arreglar.
  • Es ineficaz si no hay requisitos claros. Esto ocurre con frecuencia debido a la dificultad que tienen la mayoría de los clientes a la hora de articular sus resultados deseados.
  • La ausencia de participación del cliente a lo largo del proyecto puede dar lugar a un cliente insatisfecho al finalizarlo, cuando sea mucho más costoso revisar el diseño y la implementación.
  • Su rigidez dificulta la adaptación a retrasos y acontecimientos inesperados.