La retórica se refiere a las numerosas técnicas utilizadas para expresar una idea a través de las palabras. Por ejemplo, un producto puede ser comercializado para un adolescente de una manera diferente a la que puede atraer a un individuo de mediana edad. Independientemente de la situación, lo que se dice es tan importante como el cómo se dice. Cada circunstancia específica se denomina situación retórica.
La retórica es una herramienta importante para la interacción en contextos profesionales. Puede ayudar a determinar los resultados de nuestras conversaciones o negociaciones con los demás. Aprender a aplicar la retórica a tus conversaciones con los demás puede ayudarte a establecer conexiones más sólidas con los compañeros de trabajo, a reforzar los llamamientos durante los lanzamientos y a presentarte como un candidato atractivo durante las entrevistas.
En este artículo, definimos la retórica y explicamos cómo utilizarla en el trabajo.
Relacionado: Relacionado: 4 tipos de comunicación (con ejemplos)
Tipos de retórica
Hay tres tipos principales de retórica:
-
Retórica deliberativa: La retórica deliberativa se refiere a la información creada para persuadir a otros de que actúen. Los anuncios de productos y las peticiones utilizan este tipo de retórica.
-
Retórica epidética: Este tipo de retórica elogia o critica a otra persona. Incluye cartas de recomendación y referencias. También se conoce como retórica ceremonial.
-
Retórica judicial: Se centra en la justicia o la injusticia de una acusación. También se conoce como retórica forense y la utilizan los abogados.
Relacionado: Cómo escribir una carta de recomendación para un amigo
Componentes de la retórica
Hay varios componentes de la retórica:
-
El retórico: El retador es el dueño del mensaje. Como escritor, orador o creador de una información, decide cuál es el mensaje, cómo elaborarlo y cuándo transmitirlo.
-
El público: Los receptores de su mensaje;
-
El tema: El tema de la comunicación se refiere a lo que se cuenta a la gente.
-
El propósito: Su propósito describe por qué está transmitiendo esta información o por qué cree que otros necesitan dicha información.
-
El contexto: Esto describe el entorno y los matices específicos que rodean la comunicación.
Los tres últimos factores influirán en el método que utilice para persuadir a su público.
Recurso retórico
La apelación retórica se refiere a los métodos que utilizas para convencer a tu audiencia. Hay tres tipos de apelación:
Ethos
El ethos es un recurso doble. El orador utiliza su credibilidad en el tema para apelar a los valores y actitudes de los oyentes. Tu credibilidad como orador está influida por tu competencia y experiencia en el tema. Por ejemplo, si usted’intenta conseguir apoyo para la conservación del medio ambiente, su mensaje será mejor recibido por un público con conciencia ecológica si tiene un excelente historial como activista
Un retórico que hace un llamamiento ético también debe ser capaz de demostrar su carácter. Mientras que la credibilidad tiene que ver con la experiencia, el carácter tiene que ver con los rasgos de la personalidad. Cuando uno demuestra que tiene buen carácter, se gana la confianza de su público. Cuando forme un llamamiento ético, destaque los valores que importan a su público e incluya por qué son importantes para usted. De este modo, podrá crear una fuerte conexión con su público.
Relacionado: Rasgos de carácter: Definición y ejemplos
Logos
El logo es una apelación a la lógica o a la razón. Cuando usted utiliza el logos para hacer su apelación, apoya su mensaje con pruebas objetivas — estadísticas, hechos y otros datos verificados. Un argumento lógico es claro y coherente. Para apelar al logos, debe tener en cuenta la audiencia y el contexto de la situación retórica
Puede apoyar a los logotipos a través de:
- Utilizando el razonamiento deductivo o inductivo
- Detallar un punto determinado
- Hacer comparaciones
Pathos
El pathos es una apelación a la sensibilidad y las emociones de su público. Puede hacerlo conectando con las emociones que su audiencia ya tiene hacia un tema o evocando nuevas emociones en ellos. Entre las distintas emociones con las que puedes conectar están la alegría, la tristeza, la ira y la esperanza.
Las emociones pueden influir en la toma de decisiones. La gente puede ser más receptiva al pathos que al logos. Se puede apoyar una apelación emocional a través de:
- Imágenes vívidas que describen personas o eventos que otros encontrarán relacionables
- Historias personales con las que sus oyentes puedan empatizar
- Técnicas de narración descriptiva
Los tres tipos de apelaciones retóricas se rigen por el tiempo y la oportunidad. Cuando forme su estrategia, deberá tener en cuenta el lugar, el momento y el objetivo de su mensaje. Incluso puedes aplicar una combinación de las tres apelaciones para elaborar una narración equilibrada, adecuada y convincente.
Cómo utilizar la retórica
Siga estos pasos para utilizar la retórica en el lugar de trabajo:
1. Cree un esquema
El primer paso para comunicar con eficacia es decidir qué decir y cómo decirlo. Identifique el propósito de la comunicación, ya sea pedir un aumento de sueldo, presentar una propuesta a un cliente, negociar su salario o responder a la pregunta de un entrevistador.
Reúna toda la información necesaria y organícela en un flujo lógico. Si vas a presentar un discurso o un documento, incluye una introducción para explicar el propósito a la audiencia. A continuación, presenta los hechos. Aporta elementos de apoyo para explicar tus hechos e ideas. Los recursos retóricos serán útiles aquí.
2. Conozca a su público
La información que transmite es importante para su público, por lo que debe comprender sus motivaciones. Explique sólo lo que necesitan saber de una manera que puedan entender. Si necesitan ser persuadidos, determina qué elementos necesitas para ayudarles a decidir. Aquí es donde se selecciona un recurso retórico adecuado en función del tema. Asegúrese de utilizar un lenguaje con el que su público pueda relacionarse. Por ejemplo, si usted es un ingeniero que presenta un informe a un departamento de finanzas, quizá sea mejor eliminar el lenguaje técnico de su presentación
3. Prestar atención al contexto
Además de la audiencia, conocer el contexto le ayudará a seleccionar el lenguaje adecuado. También determinará qué elementos estilísticos puede insertar para que resuenen en su audiencia. Por ejemplo, la comunicación formal requerirá menos estilo que la informal. Además, necesitará más persuasión al comunicarse con un público no familiarizado.